Navidad, navidad… ¡Dulce navidad chiquill@!

Después de un añito... (que vaya añito chiquill@) estoy encantada de poder recibiros y presentaros mis menús de navidad.

Yo, vuestra Katalina estoy pletórica, contenta, feliz, radiante y muy emocionada de volver a sentir la magia de la navidad como antaño.

Sé que es pronto, sé que todavía el aire huele a crema solar pero… hij@ yo quiero comerme ya un polvorón, escuchar el «All I want for Christmas is you» de mi Mariah y empezar a probarme los vestiditos de lentejuelas.

¿Tú quieres lo mismo verdad? Pues Katalina te lo sirve por delante.

Ya puedes empezar a llamar a tus amigos y reuniros tras un añito feo feo, deslumbrar a tus compañer@s de trabajo en la añorada cena de navidad con un bailecito copita en mano o simplemente venirte con la familia (que tiene más integrantes que la filarmónica de Viena) a degustar el auténtico sabor de la navidad con mis menús para grupo.

Ponte en contacto ya con mis niños y no te quedes sin celebrar la navidad con tu Katalina.

¡Qué comience el cachondeo!

¡Mis primeras jornadas del atún ya están aquí!

Querid@s navegantes…

Mis niñ@s me han enseñado a subir post en la web, así que estoy entre nerviosita perdía y emocionada.

El próximo 6 de julio empezarán mis I Jornadas del Atún hasta el 11 de julio en mi restaurante. Unos días en los que mi cocina tendrá una esencia diferente y especial, con toques de nuestro mar, cortes limpios, elaboraciones delicadas de mano de mis chefs y sobre todo mucho trabajito para que todos los que me visitéis os vayáis muy contentos.

Aquí podéis ver el tiradito de atún que propone mi niño Dani (es mi sushiman)

Estas jornadas además, estaré acompañada de mis amig@s de Atún Gadira. Unos productos fresquísimos, de primerísima calidad y que son la envidia de cualquier cocina. 

 

Una cartita muy especial

Todavía no puedo desvelaros muchas cosas, ya que es temprano para daros a conocer los secretos que se preparan en mi cocina, pero os diré algo… Todos ellos además de estar riquísimos, me transportan a mi etapa en Cádiz. A esa Caleta con sus barquitas amarrás, con la alegría y luz que baña toda esa costa y sobre todo a la tradición de las cocinas del casco histórico de la tacita de plata.

También a Giovanni, el italiano que me robó el corazón, pero que me puso en la tesitura de dejar Cádiz por irme a comer macarrones todo el día, pero bueno eso es algo que ya os contaré en otro momento.

 

 

Me dicen mis niñ@s que ahora además de atender vuestras reservas en el teléfono de siempre 951 57 58 93, podéis programar vuestra visita a través de una página de reservas y que os pongo en el botoncito.

Cualquier cosita sabéis que os contesto por las aplicaciones que tengo y que podéis ver en las siguientes direcciones.

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